...Y cien millones de ducados

[Buscaglia]

Saludos.

El artículo de Tosk sobre las guerras del Congo me coge con los deberes hechos porque en mi centro de trabajo le hemos dedicado unas jornadas interdisciplinares/transversales al coltán, Kabila hijo y el conflicto regional de la zona. Además, como antiguo lector de Conrad y de la comboniana Mundo Negro (junto con la prensa, era la única revista que entraba en casa de niño), ya me tenía ganado desde el primer párrafo.

Los estados fallidos y sus guerras libradas con una incapacidad solo comparable a la crueldad son muy difíciles de analizar. Y al autor hay que agradecerle la ambición de contarnos esa larga guerra, prolija y difícil de entender desde Europa. Conflicto que narra muy bien, descendiendo hasta el detalle de unas panoplias de armamento -armas chinas, españolas, brasileñas...- y a valoraciones muy interesantes sobre la capacidad combativa actual de ejércitos poco conocidos, como el de Zimbawue o Angola.

Ahora bien, hay algo que me sorprende. En el conflicto actual en la zona hay un factor preponderante y es la explotación de unos recursos de alto valor por Occidente a través de los poderes locales (guerrilla, gobierno, banda, tribu...). Pero en el artículo la pasada guerra se presenta como un conflicto por la explotación futura de esos recursos y sin que los intereses occidentales de corporaciones y gobiernos aparezcan apenas. Mi duda es: ¿se trata de dos guerras de causas diferentes o ya en el conflicto anterior había explotación de los recursos mineros y venta a las empresas europeas y norteamericanas? Lo planteo desde el desconocimiento.

El libro finaliza con la Operación Anaconda, el ataque por fuerzas de élite norteamericanas, canadienses, australianas y afganas a un perdido valle a la búsqueda de Bin Laden. Narrado con pulso e interesante para conocer cómo se desarrollan las guerra de nuestro tiempo.

Con esto finiquito el libro, del que me queda solo hacer una valoración global.