He visto hace poco "Michiel de Ruyter. El almirante", película holandesa dirigida en 2015 por Roel Reiné.
Centrada en el personaje que da título a la misma, nos narra su participación en las guerras anglo-holandesas y los problemas políticos internos que agitaron los Países Bajos en aquella época. A priori una historia muy interesante, original, y con el aliciente extra de ver cómo a los británicos les dan en los morros.
Sin embargo los personajes son planos y la realización enfática y torpe. Las batallas navales resultan confusas, con mucha astilla por todas partes, gente volando por los aires y abuso de cámara lenta. Esta última también se utiliza con profusión en los momentos dramáticos o sentimentales.
En conclusión, una obra ramplona y totalmente fallida. Recomendable solo para quienes no sepan qué hacer con su vida durante dos horas o deseen averiguar cómo se tira por la borda (nunca mejor dicho) un presupuesto de ocho millones de euros.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
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Ab insomne non custita dracone