La Retirada de los Seiscientos

Historia Militar de todas las épocas en las que directamente ha intervenido dichos países. Hasta el 2006.

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Hans Joachim Marseille
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La Retirada de los Seiscientos

Mensaje por Hans Joachim Marseille »

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Cuando uno busca en Google el nombre de Gregor MacGregor, se puede encontrar con las referencias de ser el estafador más audaz del siglo XIX, comparándolo (en términos de estafa) con Bernie Madoff. Incluso, The Economist lo llegó a llamar “el rey de los estafadores”.

Y no sin razón: inventarse un país (Poyais) y estafar a mucha gente en Inglaterra y Francia por más de cinco años tiene su mérito, mucho más cuando pagó sólo dos años de prisión y al final fue absuelto de los cargos.

Peo lo que contaré aquí no será esa historia, ni siquiera abarcaremos toda la historia de MacGregor, que da para un libro de aventuras. Aquí se plasmará el hecho que, quizá, le dio a MacGregor el prestigio necesario para llevar a cabo las empresas fallidas que acometió.

EL ORIGEN

Ahora, ¿cómo llegó un escocés a estas latitudes?

MacGregor nació en 1786. Ingresó al ejército británico a los 16 años, y poco después pudo comprar el rango de alférez (la compra de empleos era práctica habitual en ese entonces), fue destinado al 57º Regimiento de Infantería (57th (West Middlesex) Regiment of Foot) y contrajo matrimonio con la hija de un almirante de la Royal Navy; tiempo después compró el empleo de capitán y durante la Guerra de Independencia española vio poca acción de combate, logrando el grado de mayor, con el que pidió la baja en 1810.

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MacGregor en 1804

MacGregor se caracterizaba por ser un personaje extravagante, con gusto por las medallas, los uniformes ostentosos y la buena vida. La muerte de su esposa en 1811 le privó de su principal fuente de ingresos (la dote era grande), y decidió embarcarse, literalmente, en otra aventura: la independencia de Suramérica. Se embarcó a tierras venezolanas, arribando en abril de 1812, poniéndose a las órdenes de Francisco de Miranda, entonces Generalísimo de las fuerzas republicanas, quien le otorgó el grado de coronel. A pesar de que su servicio a la naciente república duró poco (Miranda capituló en julio de ese año), MacGregor probó su valentía al mando de un escuadrón de caballería y fue ascendido a general de brigada. Aun así, le dio tiempo de casarse con una dama de la aristocracia criolla, Josefa Aristeguieta y Lovera, para más señas, prima de Simón Bolívar.

Luego de la capitulación de Miranda, MacGregor pasó a Curazao y de allí a la Nueva Granada, donde el gobierno republicano lo recibió y le dio el mando de un regimiento de infantería. Aunque odiado por sus subalternos, tuvo un comando efectivo, pero limitado: durante el sitio a Cartagena, fue uno de los integrantes de una pequeña flota que logró quebrar el cerco que mantenía Morillo al puerto, alcanzando Jamaica en diciembre de 1815.

LA EXPEDICIÓN DE LOS CAYOS

A comienzos de 1816, Haití era la base de muchos líderes republicanos que huían del cerco español en América del Sur, algunos de ellos habían participado en la defensa de Cartagena de Indias contra las fuerzas de Pablo Morillo. Simón Bolívar era el más prominente, y le acompañaban Santiago Mariño, Carlos Soublette, José Francisco Bermúdez, Mariano Montilla, Luis Brión, Manuel Piar y el propio MacGregor.

Estando en Jacmel, Bolívar organizó una expedición para invadir Venezuela con el apoyo del presidente haitiano Alexandre Pétion, logrando reunir 300 hombres, 7 goletas, armamento y provisiones suficientes. Aunque tuvo contratiempos (Montilla y Bermúdez disputaron su autoridad, y al final no embarcaron), se concretó la expedición y el 31 de marzo zarparon de Los Cayos (Aux Cayes). Bolívar fue nombrado Jefe Supremo de la expedición y Brión como Almirante de la marina.

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Después de varias travesías y un pequeño combate naval (Los Frailes, donde Brión derrotó a unos buques menores realistas), el 3 de mayo llegan a la isla de Margarita, que estaba parcialmente en control de los republicanos, al mando del general Juan Bautista Arismendi. Allí, casi todos los generales ratificaron a Bolívar como Jefe Supremo de la República. De allí, con 300 homb´res más de refuerzo, pusieron proa a Carúpano, en el oriente de Costa Firme, a donde desembarcaron el 1º de junio.

Al desembarcar, Bolívar despachó a Mariño y a Piar a tomar otras poblaciones, y simultáneamente trató de establecer comunicación con jefes guerrilleros de la zona (como José Tadeo Monagas) para que se unieran a su causa. No sólo la ayuda no llegó, sino que, al decir de un autor, “los habitantes se mostraron hostiles, prefiriendo huir al interior del país que regresar a la vista de Bolívar”. En el interín, Bolívar trató de avanzar, pero las tropas realistas comandadas por el brigadier Tomás Cires detuvieron la avanzada el 19 de junio, obligando a la tropa republicana retroceder a sus posiciones originales en Carúpano.

Bolívar decidió tomar otro curso de acción: embarcó las fuerzas disponibles y puso proa a Ocumare, en el centro del país. El 6 de julio desembarcó en dicho poblado, dictando una proclama donde anula el célebre Decreto de Guerra a Muerte de hacía 3 años. Ordenó a Soublette que avanzara hacia Valencia, y el 8 tomó Maracay, que estaba en el camino a esa ciudad. Cuando Soublette se encontraba en Mariara, se enteró que el general Francisco Tomás Morales venía a su encuentro con 500 hombres, lo que causó que los republicanos tomaran posiciones defensivas en el sitio de Las Piedras (9 de julio).

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Morales fue rechazado, pero Soublette no aprovechó la ventaja para perseguirlo, de hecho, se replegó hacia el sitio de Los Aguacates, donde Morales, ya reforzado, lo atacó (11 de julio) y lo obligó a retirarse a Maracay. Soublette despachó a un ayudante para que le transmitiera el mensaje a Bolívar, pero el oficial, bien por error o por malicia, dramatizó el cuadro hasta llegar a decir que Morales estaba próximo a tomar Ocumare con 7000 hombres. En un periodo de mucha confusión en las líneas republicanas, Bolívar decidió embarcarse dejando todo el material de guerra en la playa, sin tiempo de reembarcarlo, el 14 de julio, arribando el 15 a Bonaire. Bolívar, en carta a Pétion fechada el 4 de septiembre de 1816, explicaba la situación:

Me encuentro en una situación desesperada, rodeado de enemigos por todas partes, sin poder conservar siquiera el puerto de Ocumare, porque no tiene defensa, y nuestras fuerzas estaban casi aniquiladas por la deserción y por las pérdidas sufridas en el combate; además, según las apariencias, me hubiese quedado sin armas ni municiones, y en consecuencia me habría visto obligado a convertirme en un simple guerrillero, a la cabeza de los pocos soldados que me hubieran permanecido fieles, en medio de tantos enemigos”.

Curiosamente, en la misma carta, Bolívar le expresa a Pétion: “Tengo entera confianza en el general Mac Gregor”. Esta historia probará que no se equivocó.

LA RETIRADA

El mismo 14 de julio, los restos de la expedición y el destacamento que mandaba Soublette se reunieron en Cuyagua, un puerto pequeño muy cercano a Ocumare. Allí se organizaron, y como no quedaron altos mandos, los seiscientos soldados restantes nombraron como su comandante al único general que quedaba en pie: Gregor MacGregor. Soublette quedó como Jefe de Estado Mayor.

Al día siguiente, MacGregor tomó la decisión de marchar hacia el oriente del país para reunirse con Piar, quien se encontraba reclutando soldados para la lucha. El 18 de julio, una columna realista por Juan Nepomuceno Quero los intercepta en el paso del Onoto, pero MacGregor maniobró hábilmente y lo derrotó en una sola carga. Al día siguiente, Quero volvió a perseguirlo y a atacarlo en La Victoria, pero MacGregor lo derrotó nuevamente y siguió avanzando hacia el sureste. Después de una fatigosa marcha, los insurgentes llegaron a San Sebatián de los Reyes el 21, donde se enfrentaron a una formación realista de 300 hombres comandada por Francisco Rosete, y después de vencer a Rosete, MacGregor decidió no ocupar el pueblo y seguir su retirada. Rosete se unirá a la persecución que Morales y Quero ya venían haciendo.

Atravesando ríos (el Guárico y el Orituco) y pasando poblaciones que no opusieron resistencia, el 28 de julio llegaron a Chaguaramas. El poblado estaba defendido por el Batallón Unión, al mando del coronel Tomás García. MacGregor decidió atacar, pero luego de un combate encarnizado de 18 horas, decidió no tomar el pueblo (aunque no fue vencido) y seguir hacia el este. Siguiendo la marcha, se le incorporó el coronel Julián Infante con un escuadrón de caballería del general Pedro Zaraza, uno de los guerrilleros más importantes del llano; MacGregor había despachado tres días antes del combate en Chaguaramas a un oficial de confianza para tratar de ubicar a Zaraza y convencerlo de sumarse al esfuerzo patriota. El 2 de agosto, la columna republicana reforzada se encontró con fuerzas realistas comandadas por Quero, quien les ha dado alcance. Pero una vez más, MacGregor y Soublette derrotaron al obstinado jefe realista.

Al día siguiente, entraron al poblado de Santa María de Ipire, donde fueron recibidos por Zaraza, quien puso a disposición sus hombres y se sometió a la autoridad de MacGregor. Prosiguieron macha hacia San Diego de Cabrutica, donde arribaron el 10 de agosto, y allí se reunieron con José Tadeo Monagas, quien al igual que Zaraza, reconoció la jefatura de MacGregor.

Con las incorporaciones de ambos generales, el cuerpo expedicionario pasaba a formar un ejército de 1.800 hombres, con una infantería ya endurecida por los pasados combates y con una caballería de llaneros experimentados. MacGregor decidió virar hacia el norte, para dirigirse a Barcelona. Zaraza decidió volver hacia Ipire (que había sido tomado por Morales) para reconocer al enemigo, mientras que MacGregor y Monagas continuaron al norte.

El 3 de septiembre, MacGregor llegó a la población de Guatacaro. Allí o alcanzó la información de Zaraza de que Morales venía a su encuentro con 3.000 hombres. Sabedor a su vez de que al norte se encontraba el coronel realista Rafael López al mando de 2.000 efectivos, MacGregor resolvió avanzar para encontrarse con López en el campo de Alacrán (algunos textos lo refieren como Alacranes), y ambos ejércitos chocaron el día 6. MacGregor, al frente de la infantería, comandó una carga a la bayoneta, auxiliado por furiosas y continuas cargas de caballería de Zaraza y Monagas, derrotando a López y poniéndolo en fuga. Luego de la batalla, MacGregor guió a sus tropas hasta que finalmente ocuparon sin resistencia Barcelona el 13 de septiembre.

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Días más tarde, luego de reunirse con varios jefes independentistas, resolvieron enfrentar a las fuerzas de Morales en el sitio de El Juncal, donde el 26 de septiembre las fuerzas combinadas de Piar y MacGregor batieron a Morales. Dos de los comandantes realistas batidos por el escocés durante la retirada formaron parte de las bajas: Quero resultó herido en la refriega y Rosete muerto. Esta victoria le permitió a la causa republicana abrir un puerto seguro y una porción de territorio importante para que tiempo después Piar, al mando de todas las fuerzas, emprendiera la conquista de la extensa y rica Provincia de Guayana, lográndolo luego de vencer a los realistas en la batalla de San Félix en abril de 1817.

En total, MacGregor guió a sus hombres en una marcha de dos meses (del 14 de julio al 13 de septiembre) por más de 500 Km. de montañas y llanos, atravesando ríos, continuamente hostigado por fuerzas realistas (pero sin renunciar al ataque cuando lo consideró preciso) y logrando su objetivo: reunirse con otros generales republicanos.

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EPÍLOGO

A pesar de la victoria en El Juncal, MacGregor y Piar no se llevaron bien (hay controversia en cuanto al mérito de Piar en la batalla, se dice que Piar huyó en medio de un ataque y que quien en verdad comandó el ejército patriota a la victoria fue MacGregor), y el escocés decidió ir a Margarita, donde Bolívar lo recibió ascendiéndolo en diciembre de 1816 a general de división.

A partir de allí, la estrella de nuestro protagonista vino en descenso: trató de tomar la Florida, pero sólo conquistando (y brevemente) la isla Amelia entre julio y septiembre de 1817, supuestamente, bajo órdenes de Bolívar (lo cual nunca ha sido confirmado). Luego, en 1819, intentó tomar Portobello y Río de la Hacha (Riohacha), pero en ambos intentos abandonó cobardemente a sus hombres. De allí huyó a Honduras, donde comenzó a fraguar el fraude de Poyais, que ya armó cuando regresó a Londres. Después de huir de los acreedores, y de años en fuga entre Inglaterra y Francia, en 1838 murió su esposa y decidió marchar a Venezuela, donde se le reconocieron sus méritos en la guerra de independencia, su grado de general de división y una pensión. Vivió tranquilamente hasta su muerte en 1845.

Ciertamente, sus esquemas de estafa lo han hecho infamemente célebre en su tiempo, pero la Retirada de los Seiscientos le llevó a ser nombrado en círculos europeos “el Jenofonte de América”. Uno de sus biógrafos más críticos reconoció que esa acción fue “el cenit de su celebridad”.

FUENTES:

ARANA, Marie (2013). Bolivar: American Liberator. (https://books.google.co.ve/books?id=SnZ ... navlinks_s)
ESTEVEZ GONZALEZ, Edgar (2004). Batallas de Venezuela, 1810-1824. (https://books.google.co.ve/books?id=matJORI4DQoC&dq)
HARVEY, Robert (2011). Bolivar: The Liberator of Latin America. (https://books.google.co.ve/books?id=XHw0MPck-xcC&dq)
SLATTA, Richard y LUCAS DE GRUMMOND, Jane (2003). Simón Bolívar's Quest for Glory (https://books.google.co.ve/books?id=sEWHt-o8IdkC&dq)
SHERWELL, Guillermo (2005). Simón Bolívar. (https://books.google.co.ve/books?id=fcwQATM4RQsC)
https://es.wikipedia.org/wiki/Retirada_ ... eiscientos
https://es.wikipedia.org/wiki/Expedici% ... _los_Cayos
https://www.venezuelatuya.com/historia/ ... _cayos.htm
https://en.wikipedia.org/wiki/Gregor_MacGregor
http://www.archivodellibertador.gob.ve/ ... rticle4606
http://www.archivodellibertador.gob.ve/ ... rticle4707
http://www.cnh.gob.ve/images/Encartados/EL_JUNCAL.pdf
http://www.gramscimania.info.ve/2010/12 ... cal-y.html

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Re: La Retirada de los Seiscientos

Mensaje por Schweijk »

Interesante y poco conocido episodio. Gracias Marseille.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".

Lord Kitchener

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Re: La Retirada de los Seiscientos

Mensaje por Hans Joachim Marseille »

virtusfidelitas escribió:
Hans Joachim Marseille escribió:un pequeño combate naval (Los Frailes, donde Brión derrotó a unos buques menores realistas)
Un pequeño apunte sobre este tema.

Ciertamente el combate fue pequeño si nos atenemos a la cantidad y entidad de los buques: 7 goletas por parte de los independentistas por 1 goleta y 1 bergantín por parte de los realistas. Sin embargo, a pesar de la superioridad independentista, el combate fue bastante encarnizado y la resistencia realista duró unas 3 horas. Al final las fuerzas realistas perdieron sus buques y el 50% de su tripulación.

Como curiosidad, hay que señalar que al mando de los buques independentistas sólo había 1 americano, los otros 6 buques estaban al mando de 1 español y 5 franceses.
De hecho, se relata que la batalla naval de Los Frailes es la más destacada de la historia naval venezolana hasta ese momento... hasta la batalla naval del Lago de Maracaibo, el 24 de julio de 1823, que prácticamente la solapó.

A tal punto que el 24 de julio es el día de la Armada venezolana.

Después contaré sobre esa batalla.

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