Fotos de la campaña del ARMIR-CSIR italianos

[Buscaglia]

Saludos.

La campaña italiana en la URSS tuvo mucho de trágico y de pintoresco. Y, como una imagen vale por mil palabras, iremos colocando aquí algunas fotos para apreciarlo.

Comienzo con una que me llamó mucho la atención: unos bersaglieris revisan un tanque Grant capturado a los rusos y requisado por los latinos. Es un tópico hablar de las limitaciones de las piezas de 47/32 para batir a los pesados T-34 rusos, pero lo cierto es que, hasta 1942, los italianos bregaron principalmente con tanques de coraza inferior accesibles para sus anticarros. Cuando, como en el caso de Grant, se trataba de "pesos pesados", se tiraba de mina, cóctel Molotov o de piezas de campaña (aunque debieran haberse utilizado más los antiaéreos de 75 mm, de los que la fuerza expedicionaria italiana estaba bien provista).

[Triton]

Curiosa foto. En el norte de África, seria mas normal, pero en Rusia resulta mucho mas curiosa

saludos

[Buscaglia]

Curiosa foto. En el norte de África, seria mas normal, pero en Rusia resulta mucho mas curiosa

saludos

Saludos.

A mí también me sorprendió ver esta imagen, pero al profundizar en el tema encontré que los italianos en la URSS se enfrentaron no sólo a los Grant, sino también a los Matilda ingleses, enviados por Londres como ayuda a los soviéticos. A fin de cuentas, los italianos combatían generalmente en frentes donde los rusos no disponían de sus mejores armas, así que hasta 1942 se encontraron con pocos T-34. Y también hay que señalar que la infantería italiana en Rusia obtuvo un mejor resultado combatiendo contra estos medios blindados que en África. No sé si por el mejor "temple" en combate de los alpinos y bersaglieri que la infantería metropolitana o porque los rusos conducían mal estos medios.

La foto en cuestión está tomada en agosto de 1942, en la batalla de Serafimovich, donde los tanques soviéticos fueron rechazados con la artillería y botellas incendiarias improvisadas. Pero las bajas italianas fueron importantes: 1700 hombres. Los rusos dejaron a su vez 1.600 prisioneros y, lo que resultaba más importante, los italianos capturan 16 blindados y 10 cañones que pasaronn a reforzar su parco material.

Y ahora mismo quería ejemplificar ese material con la foto de un camello peludo de transporte... pero me da problemas el ImageShack

[Tosk]

Tengo por ahí la foto de un T-34 capturado por los italianos, cuando esté por casa veré si la puedo subir.

[Buscaglia]

¡Demonios, tras la oncena tentativa, desisto de seguir con la imagen del camello! El ImageShack me pide que me registre para incluir la foto, pero mi correo electrónico aparece como "ya registrado" (supongo que por mí mismo en otro momento, pero no tengo clave de acceso).

Si no lo puedo descargar desde el trabajo, dejaré la imagen a la imaginación de los compañeros .

[Fernando Cebrián]

Sí señor... impresionante testimonio. Espero con asia viva al camello y T-34

[Triton]

Y yo y yo

Saludos

[Buscaglia]

Saludos.

Misterios, hoy parece que sí puedo cargar imágenes. El camello de los coj...



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De todas formas, esa foto, aún respondiendo a la realidad, no pasa de ser una imagen de propaganda. Lo que todos esperamos ver, imaginando las limitaciones materiales de los italianos en el inmenso escenario de la URSS. Pero las tres divisiones del ARMIR fueron, en realidad, el contingente mejor motorizado del Ejército italiano, con más de 5.000 vehículos para menos de 60.000 soldados. ¡Ya les hubiera gustado en el norte de África disponer de un vehículo por cada docena de hombres!

Para lograr esa favorable ratio se recurrió a camiones civiles y autobuses, pero sobre todo eran camiones militares y tractores. El material se intentó enviar en convoyes ferroviarios para evitar un prematuro desgaste.

[Triton]

Muy buena la del camello. La otra es todo un clásico del ARMIR.

Con esa motorización en Libia no les hubiera ido tan mal.

saludos

[Buscaglia]

Saludos.

Bueno, comenzamos hoy cronológicamente, con la formación de la unidad expedicionaria.

El embajador Von Bismarck entregó una carta al ministro de exteriores, Ciano, a las 3 de la madrugada del 22 de junio de 1941, anunciando que el ataque alemán ya en marcha. Ciano despierta al Duce y Mussolini se enfada: “Yo no despertaría ni a mis criados en medio de la noche”, pero decide inmediatamente participar en la campaña. Al día siguiente, Italia declaró la guerra a la URSS tras vicisitudes de opereta (la legación soviética estaba en la playa).

¿Qué tropas mandar? Mussolini se inclina por lo mejor que tiene: el Cuerpo de Ejército Célere, es decir, su único cuerpo de Ejército motorizado. Ya cuatro días después, el 26, Mussolini pasa revista a la división motorizada Pasubio, que piensa destinar al este. Declara que "no hay soldados ni material semejante en toda europa". Lo sorprendente es que, por esas fechas, Hitler le estaba dando largas y diciéndole que no enviase tropas.



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Finalmente los alemanes, por puro compromiso, acceden a que Italia participe en la campaña contra el bolchevismo. El tráfico de trenes que debía llevarlos hacia Ucrania a través del paso del Brennero paralizó la red ferroviaria italiana durante semanas. Las tropas salían animosas.



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[Buscaglia]

Saludos.

Finalmente y tras muchos presiones-ruegos de Roma, el 30 de junio de 1941 Hitler aceptó la participación italiana. A partir del 10 de julio de 1941 salieron los primeros de los 225 trenes que trasladarían la expedición militar, que colapsaron el sistema ferroviario italiano. Se trataba de un viaje de 2.300 kilómetros desde Italia a la frontera ruso-rumana, vía Budapest. Desde allí, las unidades se moverían por carretera hasta el frente.

La salida del cuerpo militar expedicionario fue apoteósica. Lo señalo porque, a su regreso, más bien los ocultaron.



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El 13 de julio de 1941 el general Messe fue nombrado jefe del “Corpo di Spedizione Italiano in Russia” (CSIR). En principio no era él el elegido para este puesto, pero el designado en primera opción enfermó y Messe quedó al mando. Afortunadamente para las tropas porque, como escribió Indro Montanelli, "Messe es de los pocos generales que han salido de la guerra con su honor intacto". Caso rarísimo en el Regio Ejercito, Messe había ingresado en el ejército como simple soldado, ascendiendo a golpe de valor, inteligencia y tenacidad. Había mandado anteriormente el Cuerpo de Ejército Celere, así que estaba especialmente familiarizado con estas unidades y sus posibilidades.



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Componía el CSIR el antiguo Cuerpo de Ejército Célere: las divisiones motorizadas Torino, Pasubio y la de caballería Celere (antes Principe Amadeo). Lo componían unos 50.000 hombres, 5.000 vehículos, 4.600 animales y 80 aviones. Lo mejor que tenía Italia. Aunque esto no era mucho decir: además de las tanquetas L33, este fue el mejor medio acorazado en la URSS: el L40, con su cañoncito de 20 mm, no podía hacer gran daño a los blindados enemigos.



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[Buscaglia]

Saludos.

El ARMIR contaba de su pequeña fuerza aérea adjunta. El elemento más fuerte era un Gruppo de caza dotado de MC 200, con una dotación de 48 aparatos de los que estaban operativos, en condiciones óptimas, 36, quedando los demás en reserva y revisión. También disponía de aviones de transporte, reconocimiento táctico y enlace, auténticas anticuallas. No se le dotó de aviación de bombardeo propia, lo que resultó un gran error porque los alemanes no solían hacer caso a las peticiones de apoyo aéreo de los italianos.

Un transporte SM 81 en un aeródromo de Ucrania:



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En realidad, se había pretendido que los Caproni 311 de reconocimiento hicieran la función de bombarderos tácticos, pero no pudo ser. Un piloto italiano explicaba así su experiencia con este bimotor: “El Caproni 311 había sido un transporte ligero civil mediocre y sub-motorizado. Ahora, cuando se le ha tenido que añadir armas y municiones, aparatos fotográficos, blindaje, algunas bombas... Los alemanes no querían ni montarse en él, ¡ni siquiera para dar un paseo!

En muchas ocasiones y sin ninguna razón aparente, los Ca 311 quedaban clavados literalmente al suelo. En el ARMIR pensaron que se debía a actos de sabotaje perpetrados por los prisioneros rusos empleados en los aeródromos. Lo hicieron decepcionados porque sus prisioneros eran mucho mejor tratados por los italianos que por los alemanes: cuando los soldados soviéticos de una bolsa sabían que iban a ser capturados, corrían hacia las líneas del ARMIR para que fueran estos quienes les apresaran. La causa verdadera fue encontrada finalmente: se trataba de ratones hambrientos que roían toda la cola de caseína (fosfoproteína que se encuentra en la leche y derivados como el yogur y el queso) que aguantaba la estructura de madera del Caproni…

También creo recordar que en España se dio este fenómeno, de "baja por ratones" en el caso de los SM 81, que tenían cientos de roedores dentro de la estructura de sus alas.

[Triton]

Era sabotaje, ratones del Ejercito Rojo

Saludos

[Oskar Matzerath]

Lo mismo pasaba con los blindados alemanes y el cableado. Como lo protegían del frío con paja y en la paja había ratones, más de una vez no arrancaban porque los saboteadores ratoniles se habían comido el recubrimiento, según Beevor en Stalingrado.

[Buscaglia]

Pues sí, van a ser roedores rojo-bolcheviques porque también actuaban contra las Fuerzas Aéreas españolas de los años treinta-cuarenta.

En este caso también asustaban a los centinelas, que oían ruidos de origen desconocido cuando hacían las rondas junto a los SM 81, mientras que nada se oía en el caso de los Junkers 52, que tenían estructura metálica corrugada. No sé si estos ratones no tendrán algo que ver en los Savoia se dieron de baja mucho antes que los Junkers o los Heinkel en nuestra aviación.

[Buscaglia]

Saludos.

Más imágenes. En Italia se preparó una enorme campaña de proganda, mostrando que el ataque a la URSS era la conclusión lógica de la trayectoria del fascismo: la Marcha hacia Roma, la conquista del Imperio y Albania, la intervención en la guerra civil española... eran hitos preparatorios de este combate apocalíptico:



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Las tropas del CSIR y, posteriormente, del ARMIR, fueron así muy fotografiadas, a menudo a color, para rellenar los noticieros gráficos. Curiosamente, mientras en el desierto las fotografías gustaban de mostrar un ejército italiano muy mecanizado, cuando la realidad era otra distinta, las imágenes que se traían de la URSS reflejaban una iconografía de hombres y caballos, de épica infantería y caballería, cuando se trataba de un Ejército mucho más motorizado que el africano.



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[Buscaglia]

Saludos.

Tanto el ARMIR como el CSIR realizaron acciones heroícas, lo propio de unidades bien entrenadas y bien mandadas. La más conocida, la carga de caballería del regimiento Savoya, que destrozó tres batallones rusos en la que fue la última acción en que los jinetes cargaron y se impusieron a los infantes.

Pero hubo muchas más acciones de valor. En la batalla de Petrikoba, el 80º Regimiento de Infantería de la división Pasubio y el 3º Regimiento de Bersaglieri obtuvieron la medala de oro al valor militar.



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También los generales italianos del ARMIR-CSIR mostraron su valentía. Tres de ellos murieron en combate, lo que se ha reflejado en el hilo correspondiente a los generales muertos en la II Guerra Mundial. En la imagen, portada de un suplemento de la prensa italiana con la muerte del general De Carolis.



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[Buscaglia]

Saludos.

A finales de 1942, llegó la debacle. Que fue muy fotografiada. Los tanques rusos arrollaron a un CSIR carente de carros y cañones eficaces. A pie y con temperaturas heladoras, se realizó un repliegue desesperado e inhumano que causó miles de bajas.



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Quien caía al suelo, ya no se levantaba. Además, había que combatir contra las avanzadas enemigas. Los alemanes, por sus propios problemas o por desprecio, no colaboraron en nada.



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[Buscaglia]

Saludos.

En enero de 1943, en el despliegue italiano del frente del Don había un fusilero cada seis metros y una ametralladora cada 1.500. Con poca munición y un cubo al rojo vivo debajo para evitar que se helase. Los fusiles y las grandas no funcionaban por el frío. Las guardias eran de 30 minutos para evitar helarse. El 90% de los soldados se defendían del frío con ropas civiles y se alimentaban de pan negro y patatas cocidas.

Entonces llegó la embestida rusa, con una vanguardia de T-34 que los anticarros italianos no podían parar. Es el " sálvese quien pueda".

Los italianos retrocedieron 480 kilómetros hacia el este, con temperaturas de -30º. Se perdió más del 50% de la tropa: 84.000 muertos, 29.000 congelados y 60.000 prisioneros. Bastaron 17 trenes para llevar a los supervivientes a Italia. Los últimos llegan en mayo de 1943.

En Italia se intentó ocultar a los supervivientes, que estaban más del aspecto y peor de moral. Este fue uno de los pocos desfiles que se produjeron para celebrar la repatriación del CSIR: los demacrados alpinos de la división Julia.



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