
Este es Simon, el gato más famoso de la Royal Navy, en octubre de 1949, en la cúspide de su fama.
A bordo de la fragata HMS Amethyst era el encargado de cazar ratones cuando el navío se vio envuelto en el llamado “incidente del Yangtse”.
El 20 de abril de 1949 el HMS Amethyst hacía la travesía de Shanghai a Nanking a través del río Yangtse para relevar al HMS Consort, encargado de proteger la embajada británica en Nanking, capital del Kuomintang durante la guerra civil china.
Los comunistas chinos le tendieron una emboscada camuflando abundante artillería en un recodo del río. Al paso del barco abrieron fuego y lograron sobre él varios impactos, provocándole 15 muertos y dejándolo sin potencia en las calderas.

El Amethyst tuvo que echar el ancla y pedir socorro al Consort, pero cuando éste acudió al recate fue alcanzado también por los cañones chinos y tuvo que retirarse con nueve muertos.
El Amethyst quedó, por tanto, a merced de los artilleros de Mao, que la intención de éste no era hundirlo. Pidió al gobierno británico que declarar públicamente que el buque había penetrado en aguas jurisdiccionales chinas sin el debido permiso y que habían abierto fuego contra las fuerzas chinas. El verdadero objetivo de Mao era forzar a los británicos a reconocerle a él como gobernante de China en lugar de al Kuomintang.
Un segundo intento de rescate, a cargo del crucero HMS London y de la fragata HMS Black Swan fue igualmente rechazado pro los chinos, con otros tres británicos muertos.
En esta serie de choques los comunistas chinos sufrieron más de doscientos muertos, pero lo cierto es que el Amethyst no pudo ser liberado.
Estados Unidos y Francia movilizaron buques de guerra en las costas chinas, pero no llegaron a decidirse a emplear la fuerza.
Durante tres meses el Amethyst permaneció anclado en el río, bajo la amenaza de los cañones chinos, como rehén en espera de la decisión de Londres.
Durante ese tiempo el gato Simon se convirtió en el apoyo moral de la tripulación. A pesar de haber resultado herido en el cañoneo fue capaz de defender el buque de las ratas de río, que asediaban la despensa. Las proezas de Simon, y el consuelo que proporcionaba a los hombres mostrarle afecto contribuyeron a mantener alta la moral del barco.
Finalmente el 30 de julio, casi tres meses después de su retención y tras haber efectuado las reparaciones más necesarias, el capitán del barco John S. Kerans, tomó la decisión de escapar. En plena noche, con el mayor sigilo, se cortó la cadena del ancla y se dejó que la corriente arrastrara al Amethyst hacia la costa. Siguió un peligroso viaje a través de 167 kilómetros hasta la desembocadura, pero pudieron escapar con éxito.
Cuando el Amethyst llegó a la Gran Bretaña el gato Simon se había convertido en una celebridad y cuando murió, poco después, fue enterrado con honores militares.

El 1 de noviembre de 2007, al cumplirse el 58 aniversario de su muerte de Simon, oficiales de la Royal Navy acudieron al cementerio para animales de Ilford (Londres) para conmemorar a Simon.
En la foto aparece el capitán Stuart Hett que sirvió a bordo del Amethyst. En el acto del 1 de noviembre pasado pronunció unas palabras recordando lo importante que fue Simon en aquellos días para mantener el ánimo de jóvenes marineros que habían visto morir a sus compañeros.
Simon es el único gato que ha recibido la medalla Dickin, una condecoración civil que la PDSA (People’s Dispensary for Sick Animals) otorga a los animales que se han distinguido colaborando con los miembros de las Fuerzas Armadas.
La PDSA es la pionera de las sociedades protectoras de animales y goza de una gran popularidad en la Gran Bretaña. Su fundadora, Mary Dickin, creo en 1943 la medalla de su mismo nombrer para honrar a los animales que prestaban servicio en la guerra mundial.
Los dos primeros años fueron condecoradas palomas mensajeras (una de ellas, Paddy, participó en el desembarco de Normandía), y en 1945 la recibió por primera vez un perro, Rex, especializado en encontrar personas atrapadas con vida en los escombros de los edificios bombardeados en Londres. En esa tarea gracias a Rex se salvó la vida de 65 personas.
La medalla Dickin la han recibido hasta ahora 3 caballos, 26 perros y 32 palomas mensajeras. Y un gato.
El último galardonado, en febrero de 2007, es Sadie, por sus éxitos detectando bombas en Afganistán:

Pero esta costumbre británica de condecorar animales no es exclusiva de tiempos recientes. Ya la reina Victoria condecoró a un perro llamado Bobbie.
Era el perro del sargento Kelly, del 66th de Infantería, que el 27 de julio de 1880 participó en la batalla de Maiwand, en la segunda guerra de Afganistán. En Maiwand 2.500 soldados ingleses e indios fueron derrotados por más de 12.000 guerreros afganos,
El 66th recibió un duro castigo en el combate, de sus 512 miembros murieron 286, al cubrir la retirada del resto del ejército angloindio.

En el transcurso de la batalla un grupo de sólo once hombres quedó copado por los afganos y protagonizó una épica resistencia que sólo terminó con la muerte de todos los once británicos. Junto a ellos fue visto el perro, ladrando a los afganos con insolencia.
Los ingleses dieron por muerto a Bobbie, pero cuando el regimiento se estaba reagrupando en Kandahar apareció el animal, herido pero vivo había sido capaz de reintegrarse a “su” unidad.
Cuando los supervivientes del 66th regresaron a la Gran Bretaña Bobbie desfiló con ellos, aclamado por el público como un símbolo del heroísmo británico.
El perro, junto con otros supervivientes, fue presentado con solemnidad a la reina Victoria, que escuchó su historia relatada por sus compañeros de armas, examinó las cicatrices de sus heridas y le prendió del collar la medalla de la campaña afgana.

Fuentes:
http://www.mod.uk/DefenceInternet/Defen ... metery.htm
http://www.britishbattles.com/second-af ... aiwand.htm