Hay que decir que la información de inteligencia que le llegaba a Doorman traia mucho retraso, esto debido al inflexible sistema de retransmisión establecido por parte aliada.
Los reportes de los aviones de reconocimiento aliados en la zona (básicamente de la marina holandesa y de la aviación naval norteamericana) eran centralizados en la base naval de Surabaja, donde estaban los centros de recepción. De allí se depuraban y eran enviados a Bandoeng, al cuartel general de Helfrich. De allí eran retransmitidos a Doorman.
Así pues, la noche del 26 y el amanecer del 27, Doorman y su flota estuvieron dando vueltas esperando encontrarse con la flota de invasión. Desgraciadamente los reportes recibidos habían situado a los buques japoneses mucho mas al oeste de donde estaban realmente, también se exagero la velocidad a la que el convoy se estaba desplazando.
Doorman había recibido 3 reportes específicos, el primero, a las 1445, antes aun de partir, mencionaba dos cruceros y dos destructores cerca de las isla Arens y al noreste de la isla Bawean, el segundo era un contacto con hidros basados en crucero mas o menos en la misma posición a las 1900. Por desgracia el tercero llego con muchísimo retraso, a las 1830 unos B-17 atacaron buques de carga y destructores, hablaban de al menos 18 buques, un “acorazado” y un “portaviones”, estos últimos buques seguramente producto de una confusión. Eso a un punto muy cercano a la isla Baewan. Lo malo es que el reporte solo llego a Soerabaja a las 2220 y aunque se retransmitió a Doorman a la brevedad, en ese momento estaba en el punto mas al este del patrón de reconocimiento que la flota aliada había establecido.
Doorman considero que la posición indicada estaba demasiado lejana como para intentar una intercepción directa, y considero que si seguía su curso planificado, virando al oeste, seguramente entraría en contacto con los buques japoneses al amanecer.
Pero llego la mañana del 27, y de los japoneses nada. Lo peor de todo es que el único contacto recibido resulto ser una confusión completa. Ya hemos mencionado este pasaje anteriormente, pero quiero añadir el comentario del marinero F.I.van Esveld (Crucero De Ruyter), que escribió sobre el asunto :
- ‘’ A las 1000 aproximadamente el Exeter, que iba equipado con radar, detecto aviones a unas 40 millas al norte. El cielo estaba muy nublado y con poca visibilidad. El Exeter disparo con su batería antiaérea. Luego varias bombas cayeron a su popa. La alerta duro unos 20 minutos y las bombas no causaron daños. 15 minutos después, otra alerta sonó y hubo mas fuego antiaéreo, nuevamente sin resultado dado que el cielo estaba muy nublado. Ese segundo ataque fue mas corto.
Dos B-17 mas partieron desde Madioen al mismo tiempo que los de Malang, pero estos no tuvieron problemas, dirigiéndose al noreste, ubicando aproximadamente a las 1020 un grupo de buques enemigos. Eran el Jintsu y los destructores Amatsukaze, Tokitsukaze y Hatsukaze. Lanzando sus bombas desde 4,000 metros. Las tripulaciones aseguraron haber encajado al menos una bomba en la proa del crucero (el Jintsu). De hecho había una cobertura de cazas en la zona, con 9 A6M “Zero” provenientes de Makassar, y uno al menos ataco a los B-17, pero solo logro una pasada antes de que los bombarderos se retirasen entre las nubes.
Ambos B-17 retornaron pero solo pudieron reportar la posicion de los buques luego de aterrizar, pues sus radios estaban tambien defectuosos.
Ruta de ambas flotas el dia 26, hay que tomar en cuenta que en realidad las fuerzas japonesas estaban terriblemente dispersas, pues no esperaban una salida de la flota aliada, a la que ya creian hundida en Sourebaja o dispersa al sur de Java