SOLDADO FELIPE GUTIÉRREZ VELASCO

"Personajes" que han dejado o pretendido dejar huella en la Historia siempre dentro de un contexto militar.

Moderador: Hans Joachim Marseille

Responder
Avatar de Usuario
laguno
Teniente Coronel
Teniente Coronel
Mensajes: 4257
Registrado: 20 Jun 2010
Ubicación: En la Ciudad del Paraíso
Agradecido : 63 veces
Agradecimiento recibido: 375 veces
Contactar:

Medallas

Parches

SOLDADO FELIPE GUTIÉRREZ VELASCO

Mensaje por laguno »

Esta breve biografía narra la aventura militar de un joven natural de Laredo, localidad cántabra.

Se llamaba D. Felipe Gutiérrez Velasco y vio por primera vez la luz el diez de Enero de 1806 y era hijo de D. Damián y de Dª. Josefa, honrados ciudadanos de Laredo. Pero dejemos que sea su partida de bautismo quien nos de su filiación:

"En la villa de Laredo a trece dias del mes de Henero de mil ochocientos y seis años: Yo Dn. Fernando de Pastor Escalante Cura Beneficiado en la Yglesia Parroquial de Santa Maria de esta dha. villa y sus anejos de Seña y Tarrueza, hice los exorcismos puse el sto. oleo y Crisma y bautice solemnemente a un niño qe. nacio el dia diez de esta Mes a la hora de las doce de la Noche poco mas o menos: pusele por nre.Felipe Nicanor qe. es hijo legmo. de Damian Gutierrez nral. del lugar de Parrales, y de Josefa Velasco nral. y vez. de esta villa, nieto legmo. por linea Paterna de Pedro Gutierrez y de Maria Gonzalez, nrales. y vezs. del expresado Parrales, y por la Materna con igual legitimidad de Antonio de Velasco y de Agustina del Aro, nrales. y vezs. de esta nominada villa, fuero sus Padrinos Felipe Martinez , y Agustina Velasco quien toco al Bautzdo. y les adverti el parentesco Espiritual y demas que previene el Ritual Romano: Siendo testigos Juan Roman del Castillo, Josef Angel de Quijano y otros nrales. y vezs. de esta villa, y en feé lo firmo con el Padrino y dos testigos fha. ut supra==

Fernando Pastor Escalante Felipe de Mar Jose Angel Quijano Juan Roman del Castillo"


Bien, Felipe, que probablemente fuera de familia de marineros habida cuenta la relación íntima de esta ciudad con el Cantábrico, decidió el primero de mayo de 1830 engancharse en el Ejército, y tras ser admitido y una vez superados los trámites previos fue destinado a prestar sus servicios al Regimiento de Mallorca nº 13 de línea, donde recibió la instrucción militar pertinente durante el tiempo que marcaba la Ley, hasta que tras ser considerado apto para ello, jura las banderas, pasando luego a realizar las tareas de su clase a Pamplona, donde el anterior quince de Diciembre se había creado un tercer batallón de dicho Regimiento, por lo que creemos que ese fue su destino.

Hay que decir que el pobre padecía una dolencia conocida como flujo hemorroidal, es decir, padecía de hemorroides sangrantes, que le acompañaron durante toda su estancia en el Ejército.

Poco tardó en tener su bautismo de fuego, pues habiéndose recibido noticias ciertas de que un grupo armado de alrededor de trescientos emigrados tenían la pretensión de penetrar en España a través del Pirineo, se recibió la orden en su Regimiento de marchar a impedirlo, y allí va Felipe junto a sus compañeros, mandados por el Coronel D. Manuel Llauder, a la frontera pirenaica para tratar de impedir dicha tentativa.

Encontráronse ambos grupos y no queriendo rehusar ninguno de los dos el enfrentamiento, antes al contrario, se enzarzaron en a pelea, pero debido a la amplia superioridad numérica de Felipe y sus compañeros, acabaron por derrotarlos el veintisiete de Octubre de ese año de 1830 en las proximidades de la Localidad de Vera y dispersarlos, regresando los de Mallorca a Pamplona, donde quedó el regimiento de guarnición el resto de aquel año y todo el siguiente.

A primeros de 1832 recibe el regimiento la orden de abandonar la capital navarra y trasladarse a la ciudad del Turia, donde tras su llegada quedaron de guarnición sin mas incidencias.

Pero, ¡ay!, como consecuencia de la muerte del rey felón, del ingrato y miserable Fernando VII, estalló la guerra civil entre los partidarios de Dª. Isabel II, su hija, por un lado, y los partidarios de D. Carlos, su hermano, por el otro, quien alegaba sus derechos dinásticos, proclamándose rey de España con el nombre de Carlos V, siendo en el antiguo reino de Valencia donde se radicaban bastantes de sus partidarios, los que se hacen con el control de algunas zonas del viejo reino mediante la acción de gente de armas al mando de Jefes y Oficiales del Ejército y otros cabecillas.

Debido a esto, se destacan desde Valencia algunas Compañías para perseguir y, si es posible, capturar a los carlistas llamados Mangrané y Esparza y sus hombres, a los que consiguieron localizar, atacar, derrotar y hacer prisioneros a ambos cabecillas, tras lo cual regresaron a Valencia y ya, tras estos acontecimientos, se dedicó Felipe, junto con su Regimiento a realizar tareas encaminadas a comprobar el desarme de los carlistas y a participar en el cerco que se puso a Morella, así como a tomar parte el diecisiete de Noviembre de ese año de 1833 en la acción de Hostal Nou, acción que se volvió a repetir el siguiente día veinte y uno, día que también vio la acción del Coll de Villabona. Tras estos hechos de armas regresaron a Valencia.

Imagen

Imagen
Última edición por laguno el 02 Ago 2017, editado 1 vez en total.


"...como jueces de la competición están los dioses, que, naturalmente, se pondrán de nuestra parte, ya que nuestros enemigos han jurado en falso sobre ellos, mientras que nosotros, teniendo ante nuestros ojos tanta abundancia de posesiones, nos hemos mantenido firmemente apartados de ellas en virtud de nuestro juramento a los dioses" Jenofonte - Anábasis.
Avatar de Usuario
laguno
Teniente Coronel
Teniente Coronel
Mensajes: 4257
Registrado: 20 Jun 2010
Ubicación: En la Ciudad del Paraíso
Agradecido : 63 veces
Agradecimiento recibido: 375 veces
Contactar:

Medallas

Parches

Re: SOLDADO FELIPE GUTIÉRREZ VELASCO

Mensaje por laguno »

El siguiente año de 1834 trae consigo la orden de que los Batallones 1º y 2º marchan al Bajo Aragón, a Cuenca y a Navarra, con órdenes precisas de perseguir, interceptar y desbaratar las guerrillas carlistas que se estaban sucediendo por aquellas provincias.

Así pues, tenemos a Felipe movilizándose junto con sus compañeros y al mando del Brigadier D. Carlos Linares, para encontrar finalmente al enemigo el doce de Agosto en Pinar del Olmo, el primero de Octubre en Ochagavía (Navarra), el veinte de Noviembre en Santa Cruz de Campezo (Álava), tras lo cual, y una vez logrados los objetivos propuestos, pasan estos Batallones de guarnición a la plaza de Zaragoza.

Mientras tenían lugar estos sucesos, el tercer Batallón - formando parte del ejército que mandaba el General Valdés- parte de Valencia rumbo al Maestrazgo y habiendo sido dividido en varias columnas, se dedica a recorrer el país buscando y neutralizando a los carlistas, lo que ocurrió el primero de Octubre en Beceyte, Blanes, y en Puente de Tortosa.

En Enero de 1835 se determina que los Batallones 1º y 2º salgan de Zaragoza al mando del Brigadier Linares con la orden de realizar operaciones de vigilancia y limpieza de carlistas en Aragón y Navarra, incorporándose posteriormente al Ejército del Norte en Febrero, asistiendo a las acciones que se dieron a mediados del siguiente catorce de Mayo en Viscarret, el diecisiete en Zizur Mayor, el primero de Julio asistiendo al levantamiento del sitio de Bilbao y otros.

Ya a las órdenes directas del General Córdova, el regimiento Mallorca, y Felipe con el, asistió a la acción sostenoda con el enemigo el día seis de Julio en la Peña de Orduña, el dieciseis en la de Mendigorría y el siguiente seis de Agoste en la de Guendulein, tras la cual partieron a los dos días en persecución del General D. juan Antonio Guergué y Yániz, quien se dirigía a Cataluña, pero lo alcanzan y baten el día veintisiete en la Conca de Tremp, tras lo cual regresan los dos Batallones a Navarra en Octubre, tomando parte el quince de Noviembre en la acción de Estella y el dieciseis en la de las faldas de Montejurra.

Mientras se llevaban a cabo estos sucesos, los compañeros del tercer Batallón asiste a la acción de Allora en veintitres de Abril, con el coronel Nogueras a la cabeza. Persiguieron y derrotaron al enemigo carlista el ocho de Junio en Zurita, siendo su jefe el Coronel Verdugo. Posteriormente tuvieron un encuentro en Rafales el veintinueve, en Montalván el dieciseis de Julio, en Cortes de Arenoso el primero de Agosto, en Orcajo el trece de Septiembre, el veinte y cinco en Horta y, por último, en Minuesa el primero de Octubre. Tras estos hechos de armas marcha a Cataluña, donde sostiene un combate con el enemigo en la acción de Puebla de Segur el siguiente tres de Noviembre, tras lo cual se queda operando por Aragón y Cataluña.

El año de 1836 continúa tan inestable como el anterior y el Regimiento de Felipe ve como los Batallones 1º y 2º pasan a formar parte de la columna mandada por O,´Donnell, pasando inmediatamente a la acción y, así, los vemos batirse valientemente a lo largo de todo el año en diferentes puntos, los que son:

El 20 de Enero se hallan en la acción de Silveti, Limoain y El Espinar, en el terriotorio del viejo reino de Navarra, pasando el siguiente 28 a pelear en las inmediaciones de Zubiri, tras lo cual permanecen alertas y vigilando el territorio hasta que el 19 de Marzo los carlistas les presentan batalla en los llanos de Orduña y en las alturas de Unza, pasando luego ambos Batallones, al mando del todavía Mariscal Espartero, a enfrentarse con los enemigos en la localidad de Villarreal de Álava y tras el combate se desplazan a Vitoria, donde se acantonan, permaneciendo así hasta que el 22 de Mayo hacen una salida con el objeto de desalojar a los carlistas que infestaban los montes alaveses de Arlabán, y tras hacerlo pasan a practicar la misma operación en San Adrián y Villarreal, efectuado lo cual pasaron a practicar una operación de limpieza de toda aquella comarca, lo cual hicieron efectuando contundentes cargas a la bayoneta los siguientes días 23, 24 y 25 de ese mes de Mayo.

Imagen

Tras un breve paréntesis, empleado para descansar y reorganizarse, manteniendo la vigilancia, parten el el 25 de Agosto a Fuenfría, donde volviendo a hacer uso de la bayoneta, atacan ferozmente a los carlistas, los cuales se habían hecho fuertes en la ermita del Buen Suceso, la del valle de Toranzo, de donde los desalojan, pero decididos los partidarios de Don Carlos a no ponérselo fácil a los cristinos, se rehacen y gracias también al auxilio que recibieron logran envolver a los nuestros, batiéndolos y cogiéndoles algunos prisioneros, como al Coronel D. Antonio de la Plana y a algunos Soldados y Oficiales.

Este revés solo consiguió que los individuos de Mallorca se sintieran grandemente ofendidos en su honor y con deseos de revancha buscan la ocasión de devolver la ofensa, la que se les presenta a finales de Septiembre cuando tiene lugar un enfrentamiento con las tropas mandadas por el General D. Pablo Sanz, a las que baten allí y con las que vuelven a enfrentarse los siguientes días 23 y 24 de Octubre -cuando volvía de ser vencido por los ovetenses mandados por el Coronel D. Ramón Pardiñas el anterior día 19- en los puntos de Peñaflor y Cornellana.

Tras esto quedaron los dos batallones de Mallorca al acecho y viendo la oportunidad de distinguirse no dudan en demostrar su valor y bravura en los días que van del 6 al 25 de Diciembre colaborando en el levantamiento del tercer sitio al que fue sometida la villa de Bilbao y destacando en la batalla nocturna del puente de Luchana del 24.
Pero no nos olvidemos que existe un tercer Batallón en el bravo regimiento de Malorca número 13 de línea, el cual y mientras sus compañeros se batían el cobre en aquellas comarcas, ellos se habían hallado el primero de Enero en la acción de Sos, pasando a continuación a seguir sus maniobras en el Principado de Cataluña y mandados por el Coronel D. Juan van Halen, dan constantes repasos a aquella tierra, sucediéndose algunas refriegas y así finó el año para nuestro Regimiento.
"...como jueces de la competición están los dioses, que, naturalmente, se pondrán de nuestra parte, ya que nuestros enemigos han jurado en falso sobre ellos, mientras que nosotros, teniendo ante nuestros ojos tanta abundancia de posesiones, nos hemos mantenido firmemente apartados de ellas en virtud de nuestro juramento a los dioses" Jenofonte - Anábasis.
Avatar de Usuario
laguno
Teniente Coronel
Teniente Coronel
Mensajes: 4257
Registrado: 20 Jun 2010
Ubicación: En la Ciudad del Paraíso
Agradecido : 63 veces
Agradecimiento recibido: 375 veces
Contactar:

Medallas

Parches

Re: SOLDADO FELIPE GUTIÉRREZ VELASCO

Mensaje por laguno »

El año de 1837 no fue, desde luego, más tranquilo, antes al contrario, los enfrentamientos se sucedían constantemente y con ellos los horrores que la guerra trae consigo, y así, nuestro Felipe Gutiérrez Velasco junto a sus compañeros sudó lo suyo para contribuir con su esfuerzo y sangre a mantener los derechos al trono de la entonces inocente Isabel, arrebatando a los carlistas cada palmo de terreno que estos defendían con uñas y dientes: ¡menudos hombres eran aquellos fieles partidarios de Don Carlos V.

Decidió el Alto Mando cristino que los Batallones 1º y 2º partieran el 10 de Marzo en dirección a Durango, de donde desalojaron al enemigo que se había fortificado en el monte de Santa Marina, pero cuando la cosa se estaba decantando por los nuestros, apareció de repente la caballería carlista, poniendo en fuga a los nuestros y haciéndoles incluso algunos prisioneros.

Pero no por eso se desanimaron los de Mallorca y resto de cristinos, no, sino que enrabietados por el duro revés sufrido, el día 12 toman a la bayoneta las posiciones que defendían los carlistas en Galdácano y tras afianzarlas parten para tomar las de Elorio, y una vez logrado determinan seguir camino de Zorzona, pero las intensas nevadas caídas hizo que tuvieran que permanecer en aquella localidad cinco días, al cabo de los cuales pudieron emprender camino de la segunda, a la que llegaron el día 20, acantonándose allí durante un tiempo, al cabo del cual parten a las Encartaciones, las que ocupan el día 21 de Junio, teniendo acto seguido la acción que tuvo lugar en las inmediaciones de la vieja villa de Nestosa, de la que salieron con algunos daños.

No todo era bueno dentro del Regimiento, no todo eran victorias y feliz camaradería, no, que también había malas situaciones, como la sedición a la que hubo de hacer frente y que gracias a la rápida acción de individuos de la clase de tropa y algunos oficiales, fue pronto desbaratada, el 19 de Septiembre, y sus promotores pasados por las armas, retornando la tranquilidad y la disciplina al Regimiento de Mallorca.

El siguiente 20 de Octubre partieron cuatro Compañías del 2º Batallón en persecución de la partida carlista de Quintana, a la que localizan, baten y hacen prisioneros, incluido el propio Quintana. ¿Sería nuestro Felipe uno de los que iban en esas cuatro Compañías? Da igual, todos eran bravos en el Mallorca.

Mientras los compañeros del 1º y 2º Batallones pasaban por esa vicisitudes, los del 3º no estaban de brazos cruzados y así les vemos comportarse valientemente en cuantos encuentros mantuvieron con el enemigo, viéndoseles luchar con gran ardor el 26 de Febrero en Beceyte, el 24 de Abril en la localidad valenciana de Titaguas, el 30 de Mayo en la dura acción de Gaudera, el 20 de Julio batiéndose ferozmente en la batalla de Chiva con las tropas carlistas del Infante Don Sebastián, a los que rechazaron, debiendo estas replegarse en el Maestrazgo.

Con no menos valor les vemos combatir el las acciones de Arga y Linares, para continuar dando muestras de su valor y arrojo el siguiente 22 de Septiembre, cuando desbaratan los planes del enemigo en la acción sostenida con este en la localidad conquense de Arcos de la Cantera, para volver a batirlos en las sostenidas el 25 y 26 de Octubre en Catí y en Villar de Canes, en el Maestrazgo, cerrando el año combatiendo en el levantamiento del sitio de Lucena el 19 de Noviembre.

1838 empieza viendo como los Batallones 1º y 2º, al mando del general D. Manuel Latre, partiendo de Berrón, Asturias, el 14 de Enero, pues el enemigo había fortificado una línea defensiva sobre Mercadillo, en el valle de Mena, provincia de Burgos.

Los nuestros avanzaron junto a un Batallón del regimiento Almansa practicando reconocimientos del terreno el día 18 y entablando combate con los carlistas, los cuales pusieron en serios aprietos a los individuos de nuestro ejército, Felipe incluido, pero la pronta llegada de otros Batallones que acudían en su auxilio y los disparos efectuados por las piezas artilleras de montaña fueron suficiente para desalojarlos de aquellas posiciones que ocupaban los seguidores de Don Carlos, arrojándolos a punta de bayoneta, los cuales se refugiaron en unos parapetos que había situados en Bortedo, pero fue inútil, pues la fuerte presión de los nuestros también los desalojó de aquellos refugios.

Tras estos sucesos pasan los nuestros el siguiente primero de Febrero al denominado valle de Montija, recorriendo el país, hasta llegar el 13 a Nestosa, donde pernoctaron, partiendo sin dilación el siguiente día rumbo a Ramales, siendo de pronto acometidos briosamente por los carlistas en los sitios denominados El Boquete y Casas de la Pared, con un fortísimo tiroteo, aunque ello no amilanó a los nuestros, los cuales, despreciando el peligro, continuaron su avance hasta alcanzar Ramales y continuar la marcha a La Cavada, ambos en la provincia de Santander, pero aquí son hostigados por los carlistas, los cuales, en tropel, descienden de las montañas creando momentos de confusión entre las fuerzas cristinas, confusión que se vio conjurada por la rápida acción de la caballería, que actuó como un relámpago, disuadiendo al enemigo de continuar en su empeño, dispersándose, dejando el campo en manos de nuestros hombres.

Pero, ¡ay!, nuestro Felipe había enfermado, de tuberculosis, o quizás ya la llevara padeciendo algún tiempos, aunque sea lo que fuere, el caso es que no puede continuar con ese ritmo, y en vista de su gravedad, la Autoridad militar le envía a Santander para un reconocimiento médico exhaustivo, examen que tuvo lugar el día 13 de Marzo y cuya conclusión fue tajante: Felipe se encuentra en un estado que le incapacita para seguir prestando el servicio de las armas, pues padece de hemoptisis, de modo que se pasa informe al Cuartel general y este emite la tremenda orden de su baja definitiva del Ejército, orden que cayó sobre Felipe como una losa, pero así es la vida y el siguiente día primero de Mayo el Brigadier firma su licencia definitiva.

Así decía adiós a las armas un bravo soldado español.

Desconocemos lo que fue de su vida posteriormente, pero esperamos que se repusiera y siguiera sirviendo a España desde el desempeño de su trabajo cualquiera que este fuese.

Fuentes Documentales:

1- "Historia orgánica de las armas de infantería y caballería españolas" Tomo X, páginas Serafín Mª. de Sotto ab Ach, Teniente General y III conde de Clonard.
2- Lámina de la batalla de MendigorrÍa tomada de: "Galería militar contemporánea" Tomo II, páginas 138 y 139. Madrid, 1846
3- Documento de hoja de servicios y licencia del soldado D. Felipe Gutiérrez Velasco, propiedad del autor
4- Partida de bautismo de D. Felipe Gutiérrez Velasco: Archivo Diocesano de Santander, Libro de Bautismos de la Parroquia de Laredo de 1801 a 1809, página 158. Signatura 3307
"...como jueces de la competición están los dioses, que, naturalmente, se pondrán de nuestra parte, ya que nuestros enemigos han jurado en falso sobre ellos, mientras que nosotros, teniendo ante nuestros ojos tanta abundancia de posesiones, nos hemos mantenido firmemente apartados de ellas en virtud de nuestro juramento a los dioses" Jenofonte - Anábasis.
Responder

Volver a “Personajes de la Historia de España y Países Hispanohablantes”