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Tras el ataque al foro, donde tanta información se ha perdido, voy a volver a poner lo que sobre militares malagueños tenía publicado.
Como dije en su momento, por lo que a mi respecta, a los atacantes les va a salir el tiro por la culata: tengo guardados todos los artículos por mi publicados, de modo que los pienso volver a poner, para que aquel que esté interesado pueda leerlos y para que el atacante vea que con El Gran Capitán no se juega
"...como jueces de la competición están los dioses, que, naturalmente, se pondrán de nuestra parte, ya que nuestros enemigos han jurado en falso sobre ellos, mientras que nosotros, teniendo ante nuestros ojos tanta abundancia de posesiones, nos hemos mantenido firmemente apartados de ellas en virtud de nuestro juramento a los dioses" Jenofonte - Anábasis.
Poco es hasta el presente lo que se sabe de Andrés Becerra, aparte de que era natural de la localidad malagueña de Marbella, de modo que lo que diga sobre sus primeros años y juventud solo serán suposiciones. De entrada me aventuro a decir que debió de nacer alrededor de 1530.
Básicamente, su vida se puede resumir en cuatro o cinco puntos, de los cuales los dos primeros no ofrecen dudas y los otros dos depende de que fuentes de información usemos. Si las fuentes son marbellíes, estas las dan por ciertas. Si las fuentes no son marbellíes, no mencionan la participación de nuestro hombre.
Veámoslas:
1º- lo encontramos por primera en la documentación manejada el diecinueve de octubre de 1562, donde de manera provisional estaba como general de las tres galeras que quedaron tras la pérdida de veinticinco galeras y de alrededor de cinco mil hombres que tuvo Juan de Mendoza en La Herradura, Granada, que acudían al socorro de Orán, ejerciendo dicho cargo hasta que las puso a disposición del marqués de Santa Cruz.
Partiendo de este punto, me atrevo a aventurar que era hijo de marinero, quizás de pescadores marbellíes -pues no se tiene constancia de que su familia fuera de "rancio abolengo"- y que al estar familiarizado con la mar y las faenas propias del medio, ingresó en el Tercio, donde hizo carrera y alcanzó el empleo de capitán.
Para entonces ya era capitán de galeras.
2º- la siguiente aparición, los textos manejados nos lo sitúan como capitán del Tercio de Mar del maestre Lope de Figueroa.
Con este empleo nos lo encontramos el siete de octubre de 1571 en la Batalla de Lepanto, en el puesto de cuatralbo, es decir, que era jefe de cuatro galeras. Durante la batalla, las galeras de su mando se hallaban situadas en el sector central de la escuadra cristiana, y tras abordar una de las naves turcas, que resultó ser la que llevaba el estandarte turco, logró, después de fiero combate arrebatar al portaestandarte otomano la bandera de Alí Pachá, insignia sagrada que había sido enviada la Turco desde La Meca, matando para ello al turco de un arcabuzazo.
El estandarte, o Sanjac, solo podía portarlo el Gran Turco o su su Bajá, el cual, según un cronista de la época
"...lo traen de tela de algodón bruñida, esculpidas en ellas letras de su devoción; y esto guardaron siempre a imitación de la primera bandera que Mahoma dicen que arboló contra los christianos, la cual dicen que era de esta suerte..."
Durante el combate, logró apresar otra galera más y por cuya gesta, Felipe II le regaló la bola de oro del tope de la enseña turca como premio a su valor y arrojo en el combate. Al parecer, también le premió con el castillo de Toya, en la localidad jiennense de Peal de Becerro.
La enseña de Alí Pachá puede verse en la armería del Palacio Real del Escorial. Alí Pachá también es conocido como Alí Bajá o Alí Pashá.
En estas dos que siguen, es donde encontramos las diferencias entre la información facilitada por los marbellíes y por los no marbellíes.
3º- La documentación obtenida de fuentes marbellíes, nos informa que era uno de los protegidos de Álvaro de Bazán, marqués de Santa Cruz, y que por esa relación obtuvo el cargo de director del puerto de Málaga y que estuvo encargado de la dirección de las obras que en el puerto de esta ciudad se hicieron en aquel tiempo. Sin embargo, en las fuentes no marbellíes su nombre no aparece citado, como por ejemplo en las obras publicadas por la Autoridad Portuaria de Málaga.
"...como jueces de la competición están los dioses, que, naturalmente, se pondrán de nuestra parte, ya que nuestros enemigos han jurado en falso sobre ellos, mientras que nosotros, teniendo ante nuestros ojos tanta abundancia de posesiones, nos hemos mantenido firmemente apartados de ellas en virtud de nuestro juramento a los dioses" Jenofonte - Anábasis.
Respecto del puerto, haciendo un poco de historia, decir que en 1526, el visitador Ramiro Núñez de Guzmán informó al rey de que a esta ciudad
"...fáltale un muelle, del cual hay algún principio, y con poca costa se podría hacer..."
Como los rebatos eran continuos por causa del continuo acoso y razzias de los piratas berberiscos que asolaban las costas malagueñas, Carlos I ordenó establecer en la bahía de Málaga una base para la escuadra de galeras de España, mandada por Álvaro de Bazán. En 1534, ante la noticia de que el temido Barbarroja se dirigía a estas costas, la Corona impulsó la reparación de las murallas y las incipientes defensas portuarias, aunque no sería hasta el reinado de Felipe II, quien autoriza en 1587 el inicio de las obras de un puerto, el cual estaba llamado a convertirse en uno de los más capaces del Mediterráneo.
En cualquier caso, no sería hasta 1588,que tras los trámites administrativos oportunos,
"...se dio principio al muelle a los tres de este mes de enero. Y se echó la primera piedra santificada con la bendición y oraciones del Obispo que se halló presente a esta solemnidad, con los clérigos de su Iglesia y la Justicia y Regimiento, con gran regocijo y contentamiento general de todo el pueblo..."
Siguiendo la documentación no marbellí, quince años tardaron las obras en realizarse, impedidas, sobre todo, por los temporales, por los aportes de sedimentos del río Guadalmedina y por la necesidad de hacer acopio de recursos para ello y se sabe que la dirección de las obras fueron encomendadas al ingeniero Fabio Bursoto. Es posible que en algún momento de ese periodo de quince años las hubiera dirigido Andrés Becerra, confirmando así lo que las fuentes marbellíes nos cuentan, desconozco cuáles son sus fuentes de información.
"...como jueces de la competición están los dioses, que, naturalmente, se pondrán de nuestra parte, ya que nuestros enemigos han jurado en falso sobre ellos, mientras que nosotros, teniendo ante nuestros ojos tanta abundancia de posesiones, nos hemos mantenido firmemente apartados de ellas en virtud de nuestro juramento a los dioses" Jenofonte - Anábasis.
4º- Continuando con la información que nos proporcionan los textos usados, los marbellíes afirman que dirigió las obras del muelle de Gibraltar que se construyó en la década de 1570, pero las fuentes no marbellíes, las cuales confirman que el Muelle Viejo se construyó a la altura de la Puerta del Mar y que durante mucho tiempo fue conocido como Muelle Viejo, no mencionan en ningún momento a Andrés Becerra como director de las obras.
Respecto del muelle de Gibraltar, haciendo un poco de historia, decir que por culpa de la manera en que se construyó, se acumuló tanta arena que solo los barcos de pesca podían hacer uso de el, hubo que desecharlo y hacer el que fue conocido como Muelle Nuevo, empezándose a construir a partir de 1608 por un ingeniero del que solo sé que era capitán y se apellidaba Rojas. En esta época, nuestro Andrés Becerra debía ser ya bastante mayor como para estos menesteres y estar retirado.
¿Qué ocurre, entonces, con Andrés Becerra? ¿Quién tiene razón, los marbellíes o los no marbellíes?
Como he dicho antes, desconozco las fuentes de información que han manejado unos y otros, pero tras pensarlo un poco, me atrevo a aventurar que ambos tienen razón, solo que hay que matizar un poco las cosas. Probablemente, es posible que en algún momento Andrés Becerra se hiciera cargo de manera interina de la dirección de las obras en ambos puntos, confirmando las tesis marbellíes, pero que no fuera lo suficientemente significativa como para ser mencionado por las fuentes no marbellíes.
En 2011, la ciudad de Marbella rotuló una calle con su nombre, haciendo justicia a uno de sus hijos más de cuatrocientos años después de sus gestas. Caso típico español.
Su nieto Pedro Becerra Serrano fue abogado de los Consejos Reales y en 1660 fue nombrado oidor de la Cancillería del Perú y visitador de los Oficiales Reales de Panamá.
Fuentes Documentales
Boletín de Infantería de Marina, Nº 3, p 52. Julio de 2005.
Monumenta Cartographica Malacitana. Portus & Civitas, ps. 25-26. CABRERA PABLOS, Francisco y OLMEDO CHECA, Manuel. Autoridad Portuaria. Málaga, 2017
"...como jueces de la competición están los dioses, que, naturalmente, se pondrán de nuestra parte, ya que nuestros enemigos han jurado en falso sobre ellos, mientras que nosotros, teniendo ante nuestros ojos tanta abundancia de posesiones, nos hemos mantenido firmemente apartados de ellas en virtud de nuestro juramento a los dioses" Jenofonte - Anábasis.
