Pinturas Aviación Primera Guerra Mundial

[troyano]

El Fokker E.IV fue la variante final del avión de combate Eindecker usado por Alemania durante la Primera Guerra Mundial. Fue el primer aeroplano alemán en usar dos ametralladoras sincronizadas con la hélice (inicialmente, se diseñó para que fueran tres).

El problema era que el sincronizador de Fokker usado era único para las 3 armas. Siendo de engranajes y varillas metalicas la tensión a la que se sometia para sincronizar 3 ametralladoras era demasiado alta y tenia tendencia a romperse. Por eso acabaron instalandose solo 2.

De hecho, incluso con solo 2, era propenso a sufrir ese tipo de accidentes. Max Immelman casi la palma en un Eindecker cuando se estropeo el sincronizador y sus propios disparos le troncharon la hélice. Al final consiguió aterrizar el avión.

El problema al final fue instalar un sincronizador exclusivo para cada arma.

[Beltranejo]

La primera batalla de Inglaterra. Por Stan Stokes.
Un caza británico se enfrenta a tres bombarderos Gotha en un ataque sobre el centro de Londres.

[Antigono Monoftalmos]

Una imagen que parece sacada de una fantasía steampunk y que, sin embargo, fue real

[cv-6]

Max Immelman casi la palma en un Eindecker cuando se estropeo el sincronizador y sus propios disparos le troncharon la hélice. Al final consiguió aterrizar el avión.

Pues me suena que así (lo de estropearse el sincronizador, no lo de conseguir aterrizar) es también como murió. O al menos es una de las versiones alemanas (la otra es que fue derribado por fuego antiaéreo).

[Beltranejo]

La revelación de Barker. Por Russell Smith.
Esta ilustración muestra la victoria de William Barker sobre un avión de reconocimiento austríaco cerca del río Piave en Italia el 18 de septiembre de 1918. La víctima fue el sargento Ludwig Thaler del Flik 14D. Cuando el Albatros de Thaler comenzó a arder, saltó y desplegó su paracaídas, un dispositivo que se había introducido recientemente en los escuadrones austríacos. La visión del piloto austríaco flotando sano y salvo hacia la Tierra ayudó a convencer a Barker de que los paracaídas deberían ser un equipo necesario para todos los pilotos.

[Beltranejo]

"Un convoy en el Mar del Norte, pintado desde el dirigible NS 7 frente a la costa de Noruega". Por Sir John Lavery, 1918.
Desarrollados como aeronaves no rígidas (sin estructura interna) operados por el Servicio Aéreo Naval Real (RNAS), los dirigibles británicos de la clase North Sea o clase NS aparecieron en 1917; el primer vuelo registrado fue el 1 de febrero de ese año. La serie, que completó 14 ejemplares, voló hasta principios de la década de 1920.
Con una tripulación de 10 personas y propulsados por 2 motores Rolls Royce Eagle de 250 hp (fueron reemplazados posteriormente en algunos dirigibles por 2 motores Fiat, cada uno de 240 hp) podían alcanzar una velocidad máxima de casi 60 mph, con una autonomía de 24 horas y un techo de servicio de 9,500 pies. Llevaban de 3 a 5 ametralladoras Lewis de 7,7 mm para defenderse de los cazas enemigos y una carga de bombas de 1380 libras.
De los catorce dirigibles de la clase NS disponibles, solo seis estaban en servicio al final de la guerra. El NS7 se utilizó para proporcionar escolta aérea a la cautiva Flota de Alta Mar alemana en el viaje a Rosyth, Escocia. Este dirigible completó su último vuelo el 25 de octubre de 1921.